Es un producto que se consume hace siglos. Está
presente en todas las mesas. Muchas personas no
pueden vivir sin él. Otras personas evitan su
consumo a toda costa. Hablamos del azúcar.
¿Será sano el consumo de azúcar? ¿Habrá peligro
en comer con frecuencia alimentos que la
contengan? ¿Hay riesgo de abstenerse?
Pero la cuestión sería determinar en primer lugar
a qué llamamos azúcar. Con este término se apela
el azúcar blanco refinado que se obtiene de la caña
de azúcar, conocido químicamente como sacarosa.
Pero también llamamos azúcar a una sustancia
que está presente naturalmente en las frutas,
llamada fructuosa.
Por la confusión que existe gracias a la presentación
de algunas dietas extremas en que a la persona se le
prohíbe hasta el consumo de frutas por considerar
toda clase de azúcar nociva para el cuerpo, muchos
creen que azúcar es sinónimo de “malo para la salud”.
Pero hay que hacer una distinción importante al respecto.
¿Cómo se obtiene el azúcar? ¿Todo azúcar es fabricada
del mismo modo? No todo azúcar es fabricada de la
misma forma. El azúcar de mesa (sacarosa) responde
muy diferente en el cuerpo que el azúcar de las frutas
(fructosa). Ambos son metabolizados en glucosa
(el azúcar en la corriente sanguínea). Sin embargo, es
muy importante la manera en la que este proceso ocurre.
Cuando consumes un alimento que posee sacarosa, el
azúcar en tu sangre se eleva muy rápidamente y la
respuesta de tu cuerpo es liberar mucha insulina
para controlar la subida del azúcar en la sangre. Así
que comiendo una comida que eleve altamente tus
niveles de insulina en forma rápida es justamente
aquello de lo que quieres alejarte.
La fructosa, el azúcar de la fruta, por otro lado, no
crea la misma respuesta. Sí, tu cuerpo conoce su
azúcar, pero elevará su azúcar en la sangre y los
niveles de insulina mucho, pero mucho más lento
que la sacarosa. Esto es algo bueno, ya que da al
cuerpo más tiempo para responder al azúcar que
recién has ingerido, muchas veces no resultando
en un alto elevamiento de la insulina, sino en uno
más controlado.
Entonces, ¿cuánto azúcar debes consumir?
Cualquiera que haya probado alguna dieta
extrema “sin carbohidratos” antes puede
testificar que después de tan solo unos días
comienzas a sentirte realmente mal: adormecido,
aletargado, y posiblemente hasta constipado. Es
porque no estás incorporando la materia prima
para la formación de glucosa. No obstante, tu
cuerpo posee la habilidad de hacer glucosa aún
hasta si no comes carbohidratos. Sin embargo,
los alimentos saludables como las bananas,
manzanas, zanahorias y cebollas no necesitan ser
eliminados para controlar el azúcar en tu sangre.
Controla tus niveles de insulina y ve
como pierdes peso a lo largo del tiempo.
Por lo tanto, la clave está en ser selectivo a la
hora de consumir azúcar. Evita a toda costa
el azúcar blanco refinado. Puede resultarte
difícil evitar su consumo, ya que está presente
en todo tipo de alimentos como pasteles,
galletitas, etc.
Otra clave es elegir alimentos que aumentan tu
nivel de azúcar en sangre lentamente. Puedes
comer frutas, bayas, etc. No solo estarás
eligiendo una opción mucho más saludable, sino
que tus ansias por comer dulce disminuirán
rápidamente cuanto menos te alimentes de ellos.
No obstante, resérvate algunos permisos para
ocasiones especiales como festejos, bodas y
demás eventos en los que no sería prudente
negarte a una rebanada de torta y otras delicias.
Pero hazlo con mesura.
lunes, 27 de julio de 2009
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